http://blog.fernandezfreire.com/2017/08/viaje-italia-parte-2.html
http://blog.fernandezfreire.com/2017/08/viaje-italia-parte-3.html
http://blog.fernandezfreire.com/2017/08/viaje-italia-los-campings.html
Día 1 - 23-jul-2017
Dijimos a las 7, y a las 7 en punto estábamos arrancando el
coche. Perfecto! Si los planes se hacen bien, seguro que salen bien. Por lo
menos, lo intentamos. Salimos juntos finalmente, pensando que poco a poco nos
iríamos distanciando, pero no fue así. Hicimos el primer sprint del tirón, 2
horas y media y nos plantamos en Alcolea del Pinar, donde hicimos combustible,
algo de café y poco más. Bueno sí, unos churros, para tener claro que por el
momento no hacemos régimen alimentario. Ya en septiembre, si eso. Imposible.
Segundo sprint. Empieza a apretar el calor y empiezan los
problemas en el Scenic de los López_Mota, que se queja de un problema de
inyección. Paramos en la AP2, justo antes de Lleida, y decidimos ir por la C25.
Finalmente, podemos seguir con unos Wynn's o como se escriba, y comenzamos el
camino por la C25, que es gratuita. Al final la cosa se nos complica porque
acabamos callejeando por Olot, pero bien. No nos metemos en ningún lío
especial. El camino se hace de goma, como esperábamos, pero finalmente, podemos
llegar al camping L'Albera (antes Les Pedres) sin mayores problemas. El
check-in muy fácil y rápido lo cual agradecemos al dueño. :)
A la piscina de cabeza. Fresca y reconfortante. Una cena
rápida con lo que teníamos (pasta con chorizo de barbacoa reciclado) y empiezan
a caer unas gotas. Ponemos toldos rápido. Menos mal que pusimos el suelo,
porque en 10 minutos, empezó a diluviar y no paró hasta mucho después de
recogernos. Con diferentes grados de intensidad, pero lloviendo sin parar. Asusta un poco, incluso. Pero nos vamos a dormir. Muy cansados.
Hoy, 790KM, y casi 12 horas en el volante.
Día 2 - 24-jul-2017
Al día siguiente, amaneció sin una nube, y nos pusimos
enseguida en marcha. Los Cano estarán hoy en el Campeggio Villa Doria en
Génova, así que vamos a atravesar hoy tres países como si nada.
Salimos y
volvieron los problemas al Scenic pero enseguida se pudo continuar, y
encontramos un ritmo fácil sobre los 102 km/h. Primera parada a repostar y un
café. La estiramos un poco, para hacer que la siguiente sea la de comer ya. Gasolinera
con área de parada. Tomamos unos cafés sin problema, y los niños se hacen con
algo de comer también. Seguimos camino rápido, porque hay viento en contra.
Mucho viento, que poco a poco va amainando, pero sigue siendo un problema,
porque está muy racheado. Pasamos por las ciudades de la Costa Azul, St.
Tropez, Mónaco, y comienzan las subidas y los calores. De repente, 38ºC, pero
todo lo vamos superando sin problemas. Catástrofe Ultravioleta, nos ameniza el
camino constantemente. Impresionante todo. Nuestro Scenic no se queja de nada, ni del calor. Bien por él. El camino se nos hace muy muy muy
laaaargo, y no damos llegado a Génova. Para rematarlo, un incidente con un
camión en el que se produce un incendio pequeño, nos causa un atasco de +20min,
que tenemos que soportar a sólo 10km del camping. ¡Llegamos! ¡Ya estamos en
Italia!
A dormir. Una ducha muy rápida, y refresca por fin. Aire
Acondicionado 3 minutos y sentimos el fresco en la piel ya. Se apaga, y nos
dormimos. A las 2.14Am me despierto sudando y deshidratado. Lo pongo un poco,
pero abrimos ventanas, y entra fresco. ¡Y tanto! Casi frío (la humedad, una vez
más), y finalmente, hasta nos tenemos que abrigar un poquito. Madre mía!
Italia! ¡Esto no ha hecho más que empezar!
Día 3. 25-Jul-2017
El campanile, la basílica y el baptisterio, es un conjunto,
-obviamente- único en el mundo. Un románico toscano, que es imposible encontrar
con esta grandeza en otra parte. Está completamente lleno de turistas, y eso
que son las 19. Intentamos unos biglietos, y finalmente sí conseguimos una
visita fugaz a la catedral y al baptisterio. Grandes. Vendremos con más tiempo.
Felices. Las típicas fotos sujetando la torre y nos vamos a otra cosa. Vamos al
Porci Comodi, que dicen que es el 1 de Tripadvisor. Creímos que ya habíamos
estado aquí varias veces. Un bocadillo a los chavales, con un agua que se llena
de rocío nada más sacarla de la nevera y tres Moreti (que fueron cuatro) para
los mayores. Y dos tablas de todo. Un poco de lardo, mortadela, salami al
funghi, todo muy rico y ... grasiento. No quedó ni el papel que cubría la
tabla. ¡Fantástico! Y los niños se entretuvieron solos. No podemos pedir mucho más. Al coche, de
noche, vuelta al camping. Pensamos que no podíamos entrar ya, porque eran las
23, pero hubo suerte y nos abrieron barrera. A dormir. Decidí ducharme mañana.
Estoy destrozado. Primer día de mucho calor.
Día 4. 26-Jul-2017
Desayunos y los niños pronto corretean por todas partes.
Pese a ser un camping enorme (y carísimo), la tranquilidad es maravillosa y
tenemos una zona absolutamente para nosotros.
Volvimos, ya de noche, con la intención de comer unas
pizzas, pero no hubo ánimos. Unas ensaladas y estamos listos. Sobremesa con una
Triple de PandaBeer y una Porter Indian de Guinness. Se me cierran los ojos.
Mañana un día más tranquilo. Siena y San Giumignanno. Dormizzzzzzzz
Día 5 - 27-jul-2017
Día de ver el resto de la Toscana. Vamos! Salimos un pelín
tarde, después del desayuno, a eso de las 10.30, destino San Gimignano, espero
escribirlo bien. Con mucho ánimo de llegar, pero ya sabíamos que las colas por
aparcar en un pueblo que no puede con la presión turística, serían importantes.
Eso, pero no lo que encontramos, que básicamente, fue un morir en vida, del
infierno que es intentar aparcar en el pueblo. Algo fuera de lo normal.
Una carreterainfernalquenosepuedesoportar.
Finalmente, conseguimos aparcar muy lejos en una carretera y
caminamos casi 40 minutos hasta el pueblo, que estaba de mercadillo, y
abarrotado de gente, pero pudimos ver por fuera alguno de sus increíbles
torreones medievales, y la iglesia del pueblo, que tiene cositas que sólo se
pueden ver en una iglesia de pueblo puede tener en Italia. Miguel Ángel.
Nos vamos. No podemos esperar a irnos a Siena. Otra paliza
por carretera interminable. Y llegamos al Parking de Santa Caterina, que nos
espera por dos euros la hora. Con escaleras elevadoras, nos deja casi casi en
el Duomo. Nos pillamos una entrada completa, como no podía ser de otra forma. Y
nos metemos ya mismo en el duomo. Control de hombros, por primera vez. Calor por
primera vez. El duomo, por fuera es grandioso, pero por dentro es algo que hay
que ver alguna vez en la vida. Siena.
Una cúpula muy grandiosa, muy del estilo
de Sta. Maria dei Fiori. Decorada en azul con estrellas, y muchas estatuas de
papas. Y una cripta con la basílica protocristiana preciosa con mosaicos muy
interesantes. Ah, y una biblioteca, un poco turística, pero interesante. Mucho
Salimos. Hambre. Mucha. Buscamos en TripAdvisor, y nos vamos directamente. Al taglio, sin mesas. Nos pedimos una barbaridad de taglios, que
nos comemos con mucho amor, y unas Moreti. Incluida una de espinacas, y otras
varias dobles, con tapa, que nos recordaban a nuestra más que añorada empanada.
Un café? No pudo ser. Nos fuimos al museo de la Ópera y
vimos mucha pintura románica, en tabla y alguna escultura interesante.
Tras el museo, algunos nos fuimos a la Piazza del Campo, a
descansar, tomando un café, y otros siguieron al baptisterio y al resto del
conjunto. Finalmente, un descanso en el Campo, y al coche. Otro trozo bueno
hasta el camping. No nos da tiempo a más. Mañana madrugar.
Cena, calor y a cama
Día 6 – 28-jul-2017
Día de movernos a Roma. Salimos con alguna dificultad del
camping, pero sin incidentes, y tras repostar en Pistoia, nos ponemos hacia
Roma. Tras casi tres horas del tirón, que se nos hicieron un poco de goma,
llegamos al camping, perfectamente y sin incidentes. Recepción razonablemente
bien, y las parcelas fenomenales, con agua, luz privada, niveladas y casi
juntas. Nos ponemos a cocinar en medio de un calor importante. Aire.
Una mini siesta, y nos ponemos camino a Roma. No podemos
esperar por el bus, y nos vamos en coche, finalmente. Bien. Aparcamos en el centro de Roma, sin problemas, quizá porque no es día laborable, y nos vamos hacia el Al Marmi, que es –sin duda- un sitio que
teníamos que visitar. Algo fuera de serie. Pizzas de primera y precio muy
razonable. Eso sí, es necesario llegar temprano, o esperaremos un montón.
Llegamos a las 18.30 y teníamos todo el bar para nosotros. Después, un paseo
por el Trastévere, mirando alguna iglesia por fuera y ponemos rumbo al camping,
para llegar ya de noche, y a cama pronto, que mañana madrugar.